jueves, 31 de julio de 2008

subte

Un pibe con una sola pierna pedía plata en el subte, tenía una cara que me hizo pensar que perdió esa pierna en una situación de delincuencia, que estaba robando un supermercado y le pegaron un tiro o lo atropelló un auto cuando quiso asaltar al conductor, algo así me parece que le pasó. Cuando termina de repartir y juntar sus almanaques se queda sentado en un asiento, ocupando mucho lugar, re canchero. Tenía una zapatilla blanca, muy grande y muy nueva. Pensé en que la otra debía estar en su casa aún más nueva que ésta. Entra un señor de la solidaria al que también le faltaba una pierna, el canchero lo mira, y por el movimiento del subte el de la solidaria pierde el equilibrio, se tambalea y casi se cae. El otro se ríe re fuerte y le dice “epaaaaaa!”.

martes, 22 de julio de 2008

Carlos y Mónica

El miércoles Vale me dijo “tengo que conocer a tu papá” entonces le mandé unas fotos de él por mail. Su mamá hace un año y medio se fue a vivir a Río Turbio que es un poco cerca de Río Gallegos, que es lla ciudad donde vive mi papá. Un poco cerca en la Patagonia es re lejos igual. Al ver las fotos y sin recordar en dónde vive mi papá me dice por el msn “recién justo hablé con mi mamá, está en Río Gallegos haciendo unos trámites”, “eh, mi papá vive en Río Gallegos!, preguntale dónde está”, “dice que está en el banco y que ahora se va al Bar Central”. Llamo a mi papá al celular, está comprando unas maderas, le digo que la mamá de una amiga vive en Río Turbio y que ahora está en Gallegos en el Bar central, “cómo se llama?”, “Mónica”, “decile que soy rubio y tengo campera roja”, responde con total naturalidad, como si yo todos los días lo llamara con asuntos de este tipo. “Se llama Carlos”, dice Valeria. Mónica , muy bajito y cortante, porque está en el banco y no se puede hablar por celular, dice “polera blanca y campera negra con cuello de piel”.
Carlos: - Gauchita la petisa, ahí la llevé a la terminal.

Mónica: - Muy simpático!, habla hasta por los codos.
lo escribieron Mariel y Valevalente

domingo, 20 de julio de 2008

Caprichosa

De antes de eso no me acuerdo nada, cómo había sido el show del circo, nada.
Sólo me acuerdo yo llorando parada sobre una silla de esas apilables de plástico y patas metálicas, el circo todo vacio, ni una persona, y mi papá parado en frente, consolándome y explicándome que no, que no me podía comprar al enano, que era una persona.

En el camping

Pasé caminando y dos chicos que me miraban dijeron:
- qué chica llamativa
- sí, qué linda
- no, linda no, llamativa.

viernes, 18 de julio de 2008

Radicalismo vs peronismo

Mis papás amaban a Alfonsín. Yo tenía 3 años y hacía todo el tiempo ese gesto de agarrar una mano y la otra al lado de la cara. Tengo fotos, puedo mostrártelas. Una vez en un evento que no se qué era, mucha gente, un gimnasio, mi papá hizo de grúa entre la multitud subiendo mi cuerpo. Acercó mi cara y besé a Alfonsín.
Otra cosa que solíamos hacer en esa época era pelearnos con un amigo peronista, "el petiso Yaguar". Yo siempre iba parada en el asiento de la camioneta al lado de mi papá y casualmente, yo parada y él sentado, medíamos lo mismo. Tal es así que parece que una vez un amigote le dijo a mi papá "che, te vi con una rubia en la camioneta que no era tu mujer eh". Bueno, la cosa es que siempre pasaba que íbamos en la camioneta y de pronto mi papá con mucha urgencia me decía "ahí está el petiso Yaguar hacele hacele" y yo contenta de participar en esa pelea lo miraba en su auto y le hacía el gesto de Alfonsín, y él me respondía con los dedos en "V".
Durante muchos años, si alguien que me caía bien decía que era peronista, luego de eso me caia peor.

lunes, 14 de julio de 2008

Con botas

Me subí a un sillón de mimbre con las botas nuevas para hacerme la canchera. Me cai para atrás y me di la nuca contra el piso. Mi papá asustado me llevó al baño y mientras me mojaba con agua fría la cabeza en el lavamanos, me preguntaba “qué hicimos hoy?, qué hicimos hoy?”. Para él la respuesta tenía que ser “fuimos a Rawson” pero como habíamos hecho muchas cosas yo no sabía cual de todas decirle. Él piensa que mi tardanza al responder fue porque el golpe me había dejado inconciente y yo aun no le dije lo contrario.

jueves, 10 de julio de 2008

El níspero

Desde que nos mudamos a la casa nueva mi papá compraba plantas, las plantaba en el cantero y se las robaban. La peor vez fue una que compró siete rosales en el vivero Corchado, los plantó y al día siguiente no había ninguno, los robaron con palita, todo, los huecos redonditos perfectos quedaron. Otra vez llegamos de la playa a la tardecita y las dos acacias que había plantado (que aun tenían el tronco finito como todo árbol joven) estaban partidas a la mitad, como quien parte un escarbadiente, así. Mi papá dijo que eran los negros que iban al Independiente. Así varias veces. Una bronca tremenda tenía mi papá. La casa está muy sobre la vereda y no tenía cortinas, se veía todo hacia adentro, más de noche, cuando prendíamos las luces. Parece que una vez, antes que yo nazca mi mamá traía unas cortinas en avión, que había hecho mi abuela y se perdieron por alguna negligencia de la compañía aerea. Y cuando mi papá en Trelew la fue a recibir al aeropuerto y se enteró de esto, la culpó a ella y le dijo “ahora vas a tener cortina de chapitas de coca cola”. Bueno, la cosa es que la casa nueva tampoco tenía cortinas. Luego de reiterados robos de plantas, una noche estábamos los 3 en los sillones (que todavía estaban tapizados con la cuerina marrón) viendo tele y mi mamá mira a la vereda y dice “Pelado te están robando el níspero” y vemos un señor agachado en el cantero, ahí nomás. Y mi papá como si en la tranquilidad de ver tele hubiese estado alerta, esperando este aviso, sabiendo que estaba por pasar, abrió la ventana, saltó, corrió, corrió una cuadra y agarró al ladrón en la esquina del consultorio de Fretes y le pegó piñas. Nosotras ya estábamos ahí cerca, se ve que corrimos atrás de él, yo tenía 7 creo y lloraba pero con una sensación como de que por fin el bien le había ganado al mal. Mi papá le pegó hasta que en un momento lo agarró de las solapas con una cara que pone él cuando se enoja, a mí me la ha puesto, que es que abre mucho los ojos, se pone más rosado de lo que es siempre y deja ver los dientes de abajo y oculta los de arriba. Con esa cara le dijo al tipo “andate, andate antes de que te mate”, esta frase tal cual. Y el ladrón se fue corriendo por la Mitre para el lado de la pista de atletismo. A esa altura ya habían salido varios vecinos de sus casas y estaban por ahí preguntando qué pasó qué pasó. Seguro que les parecía algo menor el robo de una planta, pero no sabían que no era una, eran muchas. El níspero quedó tirado a mitad de cuadra, afuera de la casa de Delma. Me parece que no sobrevivió, una lástima, se lo había traido Vilma de Buenos Aires. Llegó un patrullero y un policía sacó una máquina de escribir, la apoyó en el capot del auto o sobre la parecita de una casa, y le tomaron declaraciones a mi papá. Yo pensé que iba preso. Hace 3 años, cuando ya se habían separado, mi mamá tomó las medidas, me depositó plata y fui a Once y compré cortinas color crudo para todas las ventanas de la casa.
Ayer mi mamá me contó que ella después le dijo “pelado, cómo le vas a pegar así!” y él le respondió “y vos también para qué me dijiste te están robando el níspero”.