De antes de eso no me acuerdo nada, cómo había sido el show del circo, nada.
Sólo me acuerdo yo llorando parada sobre una silla de esas apilables de plástico y patas metálicas, el circo todo vacio, ni una persona, y mi papá parado en frente, consolándome y explicándome que no, que no me podía comprar al enano, que era una persona.
domingo, 20 de julio de 2008
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5 comentarios:
a veces los padres no entienden bien nuestros deseos.
¿que enseñanza te deja a vos diciendote "NO SE PUEDE"? ¿eh?
¿porque no se puede?
no era un capricho
era un deseo.
no se como venia la mano con tu padre... quizas no se animaba a decirte qeu no tenía la suficiente plata en ese momento...
no creo qeu te haya querido decir eso...
los enanos se re venden.
re garpan en las despedidas de solteros.
todos tenemos un precio
y en esos precios.
los enanos son los qeu mas cotizan
aparte tu padre no entendía de doble lectura.
vos no buscabas al enano en si, quizas...
sino un compañero para que te acompañe en los momentos lindos, y en los dificiles tambien, ¿porque no?, de la vida
Hay tantas veces que me quise comprar una enana. Pero no una enana adulta, una enana nena. Hay una que tengo vista: se llama Rita, tiene cuatro años, pelo rubio y flequillo rollinga. Es de linda. Quiero una de esas.
Dicen que tener un hijo es como tener un cachorrito de perro que de a poquito aprende hablar. ¿Te imaginás? Yo ya estoy deseando tener niños, ¿y tu quique?
ah dios
genial
pobre enano..!
brillante
lei todos tus post de una corrida
(este fue el mejor)
jaaaaaaaaaa
jajajjaj
jajaj
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